Un Seguro de vida puede proteger a nuestros seres queridos del riesgo de perder la estabilidad financiera si llegásemos a fallecer inesperadamente. Si estamos cubiertos, la aseguradora paga a nuestros beneficiarios una suma de dinero llamada Beneficios por muerte o fallecimiento. Este se puede pagar como una suma global libre de impuestos, una anualidad o por plazos, y puede variar desde unos pocos miles de dólares hasta millones de dólares.
Los beneficios por muerte o fallecimiento
Es el dinero (suma global o de otro tipo) que se paga al beneficiario de una póliza de Seguro de vida, anualidad o pensión cuando el asegurado o titular fallece.
¿A quién se puede elegir para recibir el beneficio por muerte?
El beneficio se paga al beneficiario de la póliza. Este puede ser casi cualquier persona o incluso más de una. El titular puede nombrar a sus seres queridos, como su hijo o cónyuge. Aunque debe tener en cuenta que, si nombra a un menor de edad como beneficiario, este no podrá recibir el dinero hasta que alcance la mayoría de edad.
Los beneficiarios no tienen que ser miembros de la familia. Se puede nombrar a un socio comercial o una organización benéfica o hasta el propio negocio del titular como beneficiario.
En caso de que el beneficiario muera antes que el asegurado, o no quiera o no pueda aceptar el pago, se puede nombrar un beneficiario contingente. Si no se nombra uno, el pago del beneficio pasa a formar parte del patrimonio del titular.
¿Cuándo y cómo se paga el beneficio por muerte?
El pago del beneficio no sucede automáticamente una vez que el asegurado fallece. Los beneficiarios generalmente deben alertar a la Compañía de Seguros sobre su muerte mediante la presentación de un reclamo por fallecimiento.
Una vez que la Compañía tenga el reclamo, verificará la información y probablemente pagará el beneficio por muerte dentro de los 30 a 60 días posteriores a la fecha en que este fue presentado. Por lo general, se les dará a los beneficiarios la opción de recibir su pago como:
Un pago de suma global
Es la opción más elegida y la opción predeterminada en las pólizas. Los beneficiarios obtienen el pago en forma de cheque o depósito directo en su cuenta bancaria. Estos pueden usar el dinero para lo que quieran, por ejemplo, pagar la hipoteca, en los gastos diarios, invertirlo, comprar una casa, irse de vacaciones, etc.
Una anualidad
Algunos beneficiarios optan por convertir el beneficio por muerte en una anualidad, depositando dicho beneficio en una cuenta de inversión desde la cual se realizan pagos anuales hasta que se agota el dinero.
Pagos a plazos
Los beneficiarios pueden también elegir que se les envíe el monto del beneficio en una serie de pagos a lo largo del tiempo. La Compañía de Seguros retiene el dinero en una cuenta que paga intereses y le envía un cheque mensual por la cantidad que estos elijan hasta que se agote el capital. Esta opción brinda más control sobre los pagos en comparación con una anualidad.
Algo a tomar en cuenta es que las anualidades y pago a plazos pueden estar sujetos a impuestos. Un pago de suma global funciona mejor para la mayoría de los presupuestos.
¿Se puede dar el caso en que la Compañía no pague el beneficio o no cancele el monto elegido por la póliza?
Normalmente, los beneficiarios recibirán el monto total del beneficio por muerte. Pero si la Compañía de seguros descubre que el titular omitió algo importante o proporcionó información falsa intencionalmente al solicitar la póliza, puede que no cumpla el reclamo (negando el pago a los beneficiarios) o ajuste el pago a la baja.
Si se diese el caso en que el titular de la póliza se quitara la vida dentro de los dos años posteriores a la suscripción de la póliza, tampoco los beneficiarios recibirían el pago, aunque a menudo la Compañía reembolsaría los pagos de primas realizados.
En algunos casos, el pago del beneficio puede ser inferior al valor nominal de la póliza que el titular contrató inicialmente. Por ejemplo, con una póliza de Seguro de vida con valor en efectivo se puede ajustar los pagos mensuales o el beneficio por fallecimiento a lo largo del tiempo según sus necesidades.
Hay tipos de Seguros de vida, como los de vida entera, que acumulan un valor en efectivo del que el titular puede pedir prestado. Pero si este ha pedido dinero prestado contra el valor en efectivo de la póliza y no lo devolvió antes de morir, esa cantidad se reducirá del beneficio por fallecimiento.
El beneficio por muerte es una de las partes más importantes de una póliza de Seguro de vida: es el apoyo financiero que reciben sus beneficiarios cuando usted ya no esté. En Houten Group contamos con un equipo de asesores que le ayudaran a diseñar la mejor estrategia para obtener la cantidad de beneficio correcto y así proteger las finanzas de sus seres queridos.